De un vistazo. Sector TurÃstico. Datos de abril de 2021
21/05/2021-Turismo en establecimientos hoteleros: El número de turistas que se han hospedado en establecimientos hoteleros de Gipuzkoa en abril se sitúa un -65,4% por debajo del nivel de 2019, a pesar de que el número de turistas vascos se dobla respecto a entonces. La ocupación hotelera apenas alcanza el 25% por plazas y el 31% por habitaciones con más de un tercio de los establecimientos del territorio cerrados todos los días del mes.
Durante el mes de abril un total de 38.205 turistas se han hospedado en establecimientos hoteleros de Gipuzkoa. En abril del año pasado nos encontrábamos en pleno confinamiento y apenas 681 turistas se hospedaron en los establecimientos abiertos, lo que hace que la comparativa carezca de mucho sentido. Si comparamos con abril de 2019, sin embargo, la disminución alcanza el -65,4%. Con todo, este número de turistas es el más bajo para este mes desde 1997 (apenas un -0,5% menos entonces), aunque entonces sólo el lunes de pascua tuvo lugar en abril, a diferencia de este año que todos los días festivos de Semana Santa han caído en este mes.
Disminuye un -48,2% respecto a abril de 2019 los turistas estatales y alcanza el -86,8% la disminución de los extranjeros. La caída en el número de turistas estatales es algo más contenida gracias a que el número vascos se ha doblado respecto a 2019 (+108,5%), pasando de suponer menos del 9% del total de turista en abril de 2019, a casi el 52% en abril de 2021. El número de turistas llegados desde el resto de CCAA, sin embargo, disminuye en conjunto un -77,0%. Son los llegados desde Ceuta y Melilla, -95,7%, desde Baleares, -86,7%, Aragón, -84,6%, o La Rioja, -83,2%, los que muestran tasas de disminución más abultadas, aunque los que más crecimiento restan son los llegados desde Madrid, -72,1%, Cataluña, -82,0%, y a cierta distancia, Castilla y León, -75,8%. Entre los extranjeros los que más crecimiento restan, con diferencia, son los franceses, que disminuyen un -85,3% respecto a abril de 2019. Por detrás de estos son los estadounidenses, -98,2%, los que más crecimiento restan, y en un tercer grupo encontramos a alemanes, -86,9%, y noruegos, -90,5%. No obstante, entre los que muestran tasas más abultadas encontramos a japoneses, -99,3%, canadienses, -98,4%, y australianos, -97,7%, que en total supone apenas 49 turistas.
Con todo, el número de turistas acumula durante los cuatro primeros meses del año una disminución del -36,9% respecto al mismo periodo del año pasado y del -67,4% respecto al mismo periodo de 2019. Los turistas extranjeros acumulan una disminución del -64,0% respecto al año pasado y del -82,7% respecto a 2019. Los turistas llegados desde otras CCAA, acumulan una disminución en torno al -55,1%[1] respecto al año pasado y del -76,4% respecto a 2019. Los turistas vascos, por el contrario, acumulan un incremento en torno al +108,2% respecto al año pasado y del +119,8% respecto a 2019.
La estancia media, por su parte, se sitúa en abril en 1,78 días, lo que supone -5,06 días menos que el año pasado[2] y -0,21 días menos que en abril de 2019. Esta estancia media es la más baja para un mes de abril desde 1994 (1,78 días también entonces). Disminuye en -4,04 días respecto al año pasado y en -0,20 días respecto a abril de 2019 la estancia media de los estatales, mientras que la de los extranjeros lo hace en -18,84 días y -0,20 días respectivamente, hasta situarse en 1,78 días y 1,80 días respectivamente. Si comparamos con 2019 la estancia media disminuye fundamentalmente en los establecimientos tipo1[3], -0,32 días, mientras que en los tipo2[4] la disminución se limita a -0,04 días, hasta situarse en 1,72 días y 1,88 días respectivamente. Con todo, la estancia media del primer cuatrimestre se sitúa en 1,72 días, lo que supone -0,15 días menos que durante el mismo período del año pasado y -0,14 días menos que en 2019. Son menos -0,14 días en ambos caos para los estatales, y para los extranjeros, -0,13 días menos que el año pasado y -0,10 días menos que en 2019.
En este contexto, el número de pernoctaciones aumenta en abril de forma destacada respecto al año pasado, cuando en pleno confinamiento los hoteles casi no tenían actividad, pero disminuyen un -69,0% respecto a abril de 2019. La foto que muestran las pernoctaciones no difiere de la que muestran las entradas de turistas: disminuyen un -53,5% respecto a abril de 2019 las pernoctaciones de estatales y un -88,1% las de extranjeros. En el primer caso, sólo aumentan las pernoctaciones de vascos, +124,1% respecto a abril de 2019, mientras que para el resto de CCAA en conjunto la disminución es del -77,8%, con madrileños, -73,6%, catalanes, -85,3%, y castellanoleoneses, -76,0%, como los que más crecimiento restan. En el caso de los extranjeros son los franceses, -83,5%, y estadounidenses, 98,0%, los que más crecimiento restan, seguido por alemanes, -89,3%, y noruegos, -92,8%.
A pesar de todo, durante los cuatro primeros meses del año las pernoctaciones acumulan una disminución del -41,8% respecto al mismo periodo del año pasado y del -69,8% a 2019. Las pernoctaciones de extranjeros acumulan una disminución del -66,4% respecto al primer cuatrimestre del año pasado y del -83,6% respecto al primer cuatrimestre de 2019, mientras que caen un -54,2% y un -76,5% respectivamente las pernoctaciones de los turistas de otras CCAA. En el caso de los turistas vascos, sin embargo, las pernoctaciones acumulan un crecimiento del +104,2% respecto al año pasado y del +24,1% respecto al mismo periodo de 2019.
Como resultado de todo esto, el grado de ocupación hotelera se sitúa en abril en el 24,9% por plazas y en el 31,1% por habitaciones, lo que supone -8,5 puntos menos que el año pasado y -36,0 puntos menos que en abril de 2019 en el primer caso, y -18,5 puntos y -39,0 puntos menos respectivamente en el segundo. No obstante, para contextualizar bien estos datos es importante tener en cuenta en durante el mes de abril del año pasado el número de establecimientos hoteleros abierto era muy pequeño y que durante el mes de abril de este año el 33,4% de los establecimientos del territorio no han tenido ningún tipo de actividad. A pesar de que un tercio de los establecimientos hoteleros no tuvieron actividad en abril, el de este año es el nivel de ocupación por plazas más bajo para un mes de abril al menos desde 1992 (año en el que comienza la serie). Si analizamos los cuatro primeros meses en conjunto, la ocupación por plazas se sitúa en el 23,2% y la ocupación por habitaciones en el 30,7%, lo que supone -33,9 puntos y -36,9 puntos menos que durante el mismo periodo de 2019 a pesar de que el número de establecimientos con actividad ha sido ostensiblemente menor.
Por lo que afecta a los precios, la tarifa media o ADR aumenta en abril un +73,3% respecto al mismo mes del año pasado (peor mes del confinamiento), pero disminuye un -9,5% respecto a abril de 2019. Respecto a 2019[5] disminuyen fundamentalmente los precios en los establecimientos de tipo1, -13,1%, mientras que en el caso de los de tipo2 la disminución es más modera, -3,2%. Con todo, durante los primeros cuatro meses del año las tarifas acumulan un aumento en torno al +14,9% respecto al año pasado, aunque una disminución del -3,7% respecto al mismo período del 2019. Esta disminución se debe a los establecimientos tipo1, -6,4%, mientras que los tipo2 muestran un aumento del +2,1%.
Los ingresos medios por habitación disponible o RevPAR, por su parte, aumentan en abril un +8,5% respecto al año pasado, pero disminuyen un -59,9% respecto a abril de 2019. La disminución respecto a 2019 es del -63,1% en los establecimientos tipo1 y del -55,0% en los de tipo2. Así, durante los cuatro primos meses los ingresos acumulan una disminución en el entorno del -40,8% respecto al mismo periodo del año pasado y del -57,4% respecto al mismo periodo de 2019. Respecto a 2019 disminuyen un -59,8% los ingresos de los establecimientos de tipo1 y un -53,2% los de los establecimientos de tipo2.
Utilizando los datos de oferta de habitaciones y de ingresos medios por habitación disponible, podemos hacer una aproximación de la evolución de la facturación. La facturación media por servicios de alojamiento registra entre enero y abril una disminución del -37,7% respecto al año pasado y del -55,6% respecto a 2019. De esta forma, la facturación por servicios de alojamiento se sitúa un -47,8% por debajo de la media de los seis años anteriores y un -49,4% por debajo de la media enero-abril del periodo 2015-2019.
[1] En abril de 2020 sólo 681 turistas se hospedaron en establecimientos hoteleros de Gipuzkoa. Conocemos su distribución entre estatales y extranjeros, pero no en función de su CCAA de origen, ni de su país de origen, pero dado que el número es tan pequeño parece razonable que consideran un cero en todos los casos no resta validez a los resultados.
[2] Por el escaso número de turistas del año pasado, la estancia media de ese momento pierde, en gran medida, su comparabilidad.
[3] Hoteles de 3 o más estrellas.
[4] Hoteles de 1 o 2 estrellas y pensiones.
[5] No disponemos de datos por tipo de establecimiento para el mes de abril de 2020.