ADEGI: convenio o huelga, hay que elegir

ADEGI ha elegido el Convenio, los sindicatos la huelga. Mientras ésta persista no habrá negociación ni convenio.

El escenario en el que las empresas se tendrán que desenvolver ha cambiado radicalmente: mercados diferentes, más competidores, mejores y en muchos casos más baratos. De manera que sólo las empresas más flexibles, aquellas que se puedan adaptar a los cambios a la misma velocidad a la que se producen podrán competir con posibilidades de éxito. Porque si las empresas no son competitivas no venden, no pueden mantener los salarios, tienen que reducir empleo, y en muchos casos podrían verse abocadas al cierre.
El Convenio del Metal de Gipuzkoa no puede ser ajeno a este cambio de escenario. Por ello que ADEGI presentó su propuesta empresarial el pasado mes de febrero. Se trataba de una propuesta cuyo objetivo era dotar a las empresas de un Convenio que les permitiera adaptarse a los cambios del entorno. Para ello se recogían cambios en materia de calendario laboral, disponibilidad de horas, movilidad funcional y geográfica, así como mayores facilidades para modificar las condiciones de trabajo, entre otras.

Además ADEGI presentó su propuesta porque una de sus apuestas es la de dotar a las empresas de Gipuzkoa y a los trabajadores a los que éstas dan empleo, de unas condiciones de estabilidad y adaptabilidad a las nuevas circunstancias del entorno mediante un Convenio del Metal de Gipuzkoa.

Tras la presentación de esta propuesta los sindicatos se negaron a negociar con ADEGI, y se instalaron en el discurso del NO. NO a cumplir el calendario de reuniones pactado; NO a reconocer la legitimidad de la otra parte en franca contradicción con la buena fe negocial; NO a dialogar sobre la propuesta empresarial, sólo pretendían su retirada; NO a seguir en la Mesa.

Era una muestra clara de la nula voluntad negociadora y de que NO querían negociar el Convenio. Querían imponer su propuesta. De ahí la petición a ADEGI para que retirara la plataforma empresarial para empezar la negociación. Curiosa manera ésta de entender la negociación. Tú retiras tu propuesta y yo mantengo la mía. Eso no es negociar es imponer.

Durante todo ese tiempo ADEGI continuó en la Mesa del Metal con una actitud abierta, sin echar mano de cuestiones irrenunciables. Acudió a la negociación a dialogar, a escuchar, a reflexionar y a discutir, partiendo de las plataformas presentadas por ambas partes. ADEGI nunca ha considerado que cuando los demás exponen sus posiciones están provocando y cuando propone las propias está haciendo propuestas constructivas, porque ello impediría avanzar y llegar a acuerdos, y ADEGI quiere avanzar y llegar a acuerdos.

Precisamente porque ADEGI quiere avanzar y llegar a acuerdos, en cuanto las centrales ELA y LAB tras estar encastillados desde el inicio de este proceso de negociación en el NO a todo, decidieron la semana pasada abandonar sus posiciones inmovilistas y realizar un mínimo e insuficiente movimiento, respondió con una nueva propuesta de calado que permitía desbloquear la negociación posibilitando que ésta se iniciara, y desconvocar los nueve días de huelga convocados.

Propuesta que suponía por parte de ADEGI realizar cesiones importantes en sus posiciones iniciales; así retiró el controvertido tema de la ultraactividad del Convenio, mantuvo la antigüedad para los trabajadores, así como las garantías y derechos sindicales. No sólo eso, ADEGI aceptó la propuesta que LAB había realizado, de empezar la negociación de cero, centrando de inicio la negociación en tres aspectos; vigencia, jornada y salarios.

Este movimiento de ADEGI tendente a desbloquear la mesa del metal tenía como objetivo abrir las posibilidades para que se iniciara la negociación que permitiera acordar un Convenio del Metal para Gipuzkoa. Sí. Posibilitar que se empezara a negociar, porque la propuesta de ADEGI ha tenido como objeto crear las condiciones para que se empezara a negociar, porque es importante trasladar que todavía ni siquiera se ha empezado la negociación de los contenidos del Convenio.

Pero lo que no podíamos aceptar es que tras hacer ADEGI un cambio muy importante en sus planeamientos, desde luego de mucho mayo calado que el realizado por ELA y LAB, tras las cesiones realizadas, tras la aceptación de la propuesta de LAB, ambas centrales, sin haber iniciado la negociación y como condición para que la misma comenzara, mantuvieran los nueve días de huelga.

ADEGI lo dejó claro en la mesa. Hay dos opciones: Convenio o Huelga. Si había huelga no habría Convenio, y para que hubiera Convenio no podía haber huelga. Ante esta disyuntiva los sindicatos convocantes optaron por decir No al convenio y sí a la huelga. Ya saben lo que tiene que hacer si quieren Convenio: dejar de engañar a los trabajadores ya que no pueden esconder su estrategia de fondo, No al Convenio, si a la confrontación, a la bronca y a la huelga, buscando réditos electorales cortoplacistas.

Que ante la disyuntiva entre convenio o huelga los sindicatos hayan optado por ésta no ha hecho sino confirmar las sospechas de ADEGI en el sentido de que el verdadero interés de ELA y LAB en esta negociación se dirigía no a lograr un Convenio para los metalúrgicos de Gipuzkoa y las empresas que les dan trabajo, sino a profundizar en su estrategia de confrontación y bronca permanente.

Las empresas del metal de Gipuzkoa, mientras tanto, están haciendo cada vez mayores esfuerzos para adaptarse a los entornos crecientemente cambiantes del s.XXI. Pero ELA y LAB parece que no se quieren enterar que el mundo ha cambiado, que las circunstancias cambian cada día y que las empresas necesitan adaptarse a esos cambios a la misma velocidad a la que se producen. ELA y LAB prefieren seguir en el inmovilismo que les caracteriza, anclados en discursos y prácticas sindicales propias del s.XIX.

Defender los derechos de los trabajadores poniendo en peligro numerosos puesto de trabajo, como se hace con esta huelga, que además puede propiciar que de hecho se destruya empleo; comprometer la viabilidad de muchas empresas que van a tener que soportar casi dos semanas de huelga en seis meses (los siete de esta convocatoria, los cuatro realizados y los dos las huelgas generales) con la pérdida de clientes, mercados y oportunidades de negocio que las mismas van a provocar, es una irresponsabilidad que sólo la sensatez de los trabajadores que a pie de fábrica conocen la situación de sus empresas puede evitar.

Asimismo la merma salarial que los trabajadores han sufrido y van a sufrir como consecuencia de esta irresponsable huelga será imposible de recuperar con los hipotéticos incrementos salariales del futuro. Ninguna central sindical les podrá resarcir de esta pérdida.

Reiteramos nuestra confianza en que la responsabilidad y el interés de los trabajadores les lleven a actuar con más sensatez que la demostrada por los representantes sindicales que patrocinan la huelga.

Cuando ELA y LAB decidan optar por el Convenio en vez de por la Huelga tendrán a ADEGI dispuesta a iniciar las negociaciones del Convenio del Metal, pero sin imposiciones, chantajes ni amenazas.